Párese que no entiende razones (cognición en los ancianos)

La parte de el pensamiento del adulto mayor se va deteriorando poco a poco, ya que el proceso de envejecimiento no solo es en el cuerpo sino también en el cerebro y todo el enlace neuronal que se encarga de transmitir y compartir la información, dicho así es normal entonces comprender que el adulto mayor olvide cosas, no recuerde nombres, que se le caigan los objetos, que tartamude un poco al hablar o tal vez sea todo lo contrario como por ejemplo tener una lucidez espléndida y una memoria impresionante, pero son casos especiales dignos del aplauso. Estos indicadores que mencionaré son algunos de los deterioros que sufre la cognición 

 

PERDIDAS MEMORIA

Posiblemente éste sea el síntoma más común en las demencias de la tercera edad. Se olvida la información recién aprendida, las fechas importantes, se pregunta por lo mismo en reiteradas ocasiones… Como familiares o cuidadores debemos servir al anciano como recordatorio constante de aquello que ha olvidado, manteniendo siempre la paciencia y repitiendo la información tanto como sea preciso.

“Olvidar lo recién aprendido pero recordar lo que sucedió hace 50 años suele ser un síntoma común en la tercera edad”

DIFICULTAD PARA RESOLVER PROBLEMAS 

También se suele dar una pérdida de las habilidades de planificación y cálculo. Tareas que hasta ahora resultaban sencillas como sumar o restar en el supermercado o seguir una receta de cocina paso a paso pueden convertirse en un auténtico reto

DIFICULTAD PARA DESEMPEÑAR TAREAS COTIDIANAS 

Con la aparición del Alzheimer y demás demencias similares el anciano pierde la capacidad de realizar algunas tareas cotidianas. Quizás olvidó las reglas de aquel juego de cartas o ya no sabe cómo encender el horno, por lo que el rol del cuidador adquiere un valor incalculable para él.

DESORIENTACIÓN EN TIEMPO Y LUGAR

Otro signo propio del Alzheimer es la desubicación temporal y espacial. El anciano pierde la noción del tiempo y no sabe con certeza en qué día de la semana o estación del año está. Lo mismo sucede con el espacio, olvidándose de donde se encuentran o cómo llegaron hasta ese punto.

PROBLEMAS DE LENGUAJE

También se pueden desarrollar dificultades en la expresión oral y escrita. Puede ser que el anciano pierda la capacidad de desarrollar un discurso coherente de principio a fin, quedándose en blanco en medio de una conversación o repitiendo constantemente la misma idea. También puede darse una dificultad en la búsqueda de las palabras adecuadas, limitando notablemente su vocabulario y capacidad expresiva. 

EXTRAVIAR OBJETOS 

Otro síntoma recurrente es el de mover las cosas de sitio. Cuando utilizan un objeto olvidan colocarlo de nuevo en su sitio. Así que la próxima vez no lo pueden encontrar. Cuando esto sucede ya a menudo, es posible que sospechen que alguien les está robando.

PERDIDA DEL JUICIO 

Su capacidad para razonar o fijarse en las cosas importantes también se suele ver disminuida. En este punto puede suceder que no valoren en absoluto la labor de su cuidador o que se olviden de su aseo personal por ejemplo